LA HISTORIA DE  LOS COMPONENTES PARA EL CALZADO

La fabricación de calzado ha estado vinculada a la sociedad desde la Prehistoria, fruto de la necesidad de los hombres de proteger sus pies de las inclemencias climatologicas y de la naturaleza que le rodea.

A lo largo de la Historia, el zapato, su diseño y los materiales que lo componen han evolucionado. En su fabricación se han empleado metales, pieles (algunos sin curtir o con pelo), hojas de palmeras, maderas de diferentes tipos, sedas, bordados y una larga lista de productos diversos.

El calzado ha ido cambiando con la evolución de la especie humana. A las originales de protección y aislamiento se le fueron añadiendo otras funciones, como la social y estética

La verdadera necesidad de desarrollar una industria de auxiliar a la altura de la demanda de los consumidores comenzó con los procesos recientes de mecanización. La especialización en la cadena de producción se produjo cuando los compradores comienzan a ser mucho más exigentes y piden al calzado que cumpla unas determinadas combinaciones de precios, grados de calidad, confortabilidad y moda. En este momento inician su despegue las compañías de componentes para el calzado.

El salto definitivo de la industria auxiliar se produce en España en los años sesenta, fundamentalmente en la Comunidad Valenciana y, sobre todo, en las ciudades de Elche, Elda y Villena. Ello fue debido a la gran concentración de centros de producción. En estas localidades se fabricaba más del 70% del calzado nacional y uno de cada cuatro zapatos que se usaban en Europa.

La industria auxiliar se transformó en una pieza clave en el avance sectorial y en fuente de abastecimiento de materiales para las fábricas de calzado primero y, más tarde, como proveedora de ideas, novedades y tendencias.

La evolución del calzado ha empujado a los componentes a modernizarse y adaptarse en cada momento a las exigencias de las tendencias que dominan cada temporada.

El sector industrial de los componentes ganó protagonismo entre la producción manufacturera, con una intensa inversión en tecnología y moda. Con estas acciones se aportó durabilidad, confortabilidad y valor añadido al calzado para que fuese más competitivo en todos los mercados en los que ya estaba presente.

Hoy en día el calzado español está reconocido a nivel mundial, gracias a su diseño, su moda y su saber. Pero el secreto de este éxito se debe en parte a que dispone de una fuerte y valiosa industria de Componentes, curtidos y maquinaria para el calzado, que invierte en crear productos de alta calidad, diseño y moda

© Imágenes cedidas por el Museo del Calzado, Elda.

© Imágenes cedidas por el Museo del Calzado, Elda.